Y tu beso como el poema Dos de Dios
Y tu mirada verde como los crueles
como las aspas del horizonte
que esta palabra ya no sorprende
Patricia Gaete
y el oscuro desprecio de tu efemérides.
Las cenizas ya se inflaman
en cada cero de mis ojos
la llamada numerosa
a los tuyos verdemente
ya clavados
y encordados para siempre
pero a mí no me sorprende
He aquí la Cueca Porteña!!
